Escuchaba solo música de combi
Suave camay amigo, ponte al toque, lleva conmigo, sube al chévere
Remoto tenor, maldito pies de plato, bolsa de heno
consagrada a tu frío.
La ciudad cosecha vientos que soplan en 1980 sobre la pampa desierta
entre el Cerro San Cristóbal y la Circunvalación
perros pálidos, lentos, como pesas con hambre
olvidadas por sus dueños, libres para encontrar la muerte
A su lado, esos niños descalzos y resistentes
Detrás, el humo negro de la chatarra:
Esa sensación llamada Lima.
Causa, sube y no me converses,
saco la chaira ¿sabes?
tengo filo en las uñas
causa, causa, causita
¿Has visto mi cicatriz? Me la hicieron en Luri
Guarda con avisarle a nadie. Sigue tranquilito.
¿Qué es un niño que camina con miedo?
Un encuentro afortunado con la realidad
Chispa que divide a quienes entienden lo que sucede
y los que viven alterados en una casa de paja,
frente a la tele
¿Con qué concha te atreves?
Un dolor en el estómago porque el puñetazo había perforado mi barriga
¿Así se muere?
Aprendemos a vivir a golpes,
¿y quienes reciben la puñalada antes?
Antes del necesario choque protector.
Dicen que no hay que comer pescado
pero si ayer nos hemos atragantado un cebiche
Ojos de sospecha, tal vez acostumbrándonos a la idea
de que en este lugar es tan fácil morir.
Luego descubrieron que solo los pobres mueren del cólera
El divino protector extendió su manto invencible
sobre mi familia y mis amigos
mi casa de paja
mis vecinos,
sobre mí.